Conociendo la D.O. Valdeorras. En su visita a Valdeorras, Vieites estuvo en una pizarrera y en la bodega A Coroa para conocer de cerca el trabajo de la denominación de origen.
No poder aumentar la potencia eléctrica o tener un servicio de Internet deficiente están lastrando el desarrollo de las empresas de Valdeorras. Son problemas nuevos que se unen a otros ya endémicos, como la falta de buenas conexiones terrestres, unidas a unas cada vez más deficientes conexiones en tren y autobús con la capital provincial o hacia A Gudiña para enlazar con el AVE. De todos esos temas y de algunos más tomó nota el presidente de la Confederación de Empresarios de Galicia, Juan Manuel Vieites, en su visita a la comarca para conocer la patronal y el tejido industrial sobre el terreno. Vieites escuchó con atención a Araceli Fernández, presidenta de Aeva; y a Víctor Cobo, máximo responsable del Clúster de la Pizarra. Estuvo presente también la presidenta de la CEO, Marisol Nóvoa.
«La cobertura de fibra óptica es muy desigual en la zona y hay polígonos que siguen usando banda ancha para tener Internet», denunció Araceli Fernández, recordando que tras la pandemia se ha visto todavía más la necesidad de contar con un buen servicio de nuevas tecnologías, y lo fundamental que es no solo para trabajar desde casa. Criticó que las empresas de telefonía ofrezcan servicios que, una vez que les dicen la ubicación de las empresas, ni siquiera les pueden ofrecer. Es una situación que arrastran muchas empresas, entre ellas las pizarreras. Porque aunque algunas tienen sus oficinas en el valle de Valdeorras, la mayoría las siguen manteniendo en las montañas de Carballeda. La cobertura es mala. Y no es el único problema que arrastran y que está lastrando al sector. En el caso de la pizarra, la luz se ha convertido en un suministro preciado. Las empresas demandan mayor potencia eléctrica para poder incorporar más máquinas en las naves de elaboración y avanzar en la industrialización del sector, pero se encuentran con la negativa de las empresas eléctricas. «Nos dicen que están al límite», remarcó Víctor Cobo. Eso, dijo, está lastrando al sector, haciendo que las empresas sean menos competitivas ante otros competidores directos que sí pueden avanzar en la mecanización de sus productivos. Porque, y eso enlaza con otro de los problemas del sector, falta mano de obra, «cualificada y no cualificada», tal y como resaltó Araceli Fernández. Y ahondó en la idea: «Es curioso y es un mal que hay que estudiar a nivel nacional. Es curioso con la cifra de paro que hay... Es problema de aptitud y de actitud. Teníamos que empezar a reclamar una Ley de Educación que tenga en cuenta la formación de actitud». En ese sentido, Vieites aseguró que la CEG está trabajando con la Consellería de Educación. «Todo lo relacionado con la FP tiene que moverse a la demanda de lo que el mercado solicita», destacó.
La importancia de las materias primas
En su intervención, Vieites remarcó la importancia de las materias primas, tal y como ha evidenciado la pandemia, con la subida de precios y el desabastecimiento en algunos sectores. «Esas volatilidades nos ha llevado a que se han convertido en valor refugio. Ahora se consideran más rentables. Los inversores se han volcado y ha aumentado la demanda. Por eso hay necesidad de reindustrializar y no depender tanto de Asia y otros países», dijo, para después reconocer la «capacidad de arrastre» que tiene la pizarra para la economía.
Enlace: Los malos servicios de luz e Internet lastran a las empresas de Valdeorras (lavozdegalicia.es)
